A veces, solo a veces ocurre. Cuando los niños, el trabajo, la casa, parecen que me están diciendo: » hasta aquí llegaste Cristina». Entonces cierro fuertemente, (casi con rabia) los ojos y a veces de pronto me llegan olores y voces facilmente reconocibles por mí. Me llega ese olor a café recién hecho ,esa olla exprés siempre a punto y a su hora, ese olor a limpio…a ropa recién tendida y muebles listos para la prueba del algodón. Mi casa sin duda. 70 metros, en los que nos criamos ocho hermanos. Aunque nos pasábamos la vida en la cocina. Aquellos escasos 15m. lugar de reunión de todos, pues aún pudiendo disfrutar de un salón (modesto pero confortable) siempre fue lugar de refugio, de confidencias y porque no decirlo, las mayores broncas entre hermanos fueron siempre allí….donde la válvula de la olla exprés siempre estaba girando y pitando.
Mucha gente en un pequeño piso y un padre, que sin ser malo, imponía su autoridad de una forma equivocada, aunque viéndolo ahora después de tantos años, tengo que decir, con dolor, que se trataba de un ser incomprendido y lleno de traumas de su niñez. Una niñez horrible y llena de soledad. Víctima de unos padres egoístas que jamas cuidaron de él.
Poco a poco, el pequeño piso se fue vaciando, las hermanas mayores fueron casándose, buscando erroneamente el camino para conseguir esa libertad que anhelaba cualquier muchacha de su edad aunque en realidad lo que debían buscar era la independencia.
Poco a poco de tres dormitorios sobraban dos, quien lo iba a decir cuando estuvimos ocho…
a pesar de ello «el refugio», continuaba a pleno rendimiento. Jamas falto esa cafetera recién hecha y esa enorme olla express, testigo de tantos años de risas, lagrimas, confidencias…yo siempre estuve allí, la pequeña, la última en abandonar.
La que se fue, cuando el barco se hundió cuando aquellos 70m quedaron vacíos, la familia se disperso. Sin risas en aquella cocina, sin ollas pitando, sin cafeteras recién puestas y sin voces.
Aquellos 8 ya son casi 30….algún día no sé si entre todos encontraremos un lugar que se asemeje a aquella cocina y nos volvamos a sentar, a reir y charlar de todo y de nada , aunque con amargura pienso que ya es imposible. Muchas heridas por cicatrizar. y lo fundamental, faltas tú Mamá, aquella cocina era tu alma, limpia y siempre pendiente de cada uno de tus ocho hijos. A veces, solo a veces, cuando cierro los ojos y te veo, ahí con tu delantal puesto y tod@s riendo y charlando contigo Mamá, ojalá estuvieras aquí y para poder darte aquellos besos que no te di y decirte cuanto te quería.
Cristina
(colaboradora del blog TUSITALADECAI)
He decidido terminar ésta noche asomándome por esa famosa cocina de la q tantas veces me has referido. Nunca estuve en esos 70 metros pero en muchísimas ocasiones me has hecho partícipe de ello, con tus historias sin fin. Ya hace algunos años q nos conocemos y estoy segura tb de q cuando las dos seamos viejas y tengamos a nuestros nietecillos, inundaremos sus cabecitas de locas historias en la q tú y yo seremos las protagonistas. Pero todo esto pasará dentro de muuuchos años y ahora lo q toca es seguir….. Q no es poco. Me alegro de conocerte Cristina y me alegro saber de tu hermano Salvador. Besos!!
Que bonitas palabras cris!!! Me as emocionado y toooo esa cocina por lo que veo tenía mucho encanto !! Este blog promete !! ????
Emotivo relato, cargado de sentimientos, asoma la tristeza que provoca recordar tiempos añorados que no volverán. Una madre es el pilar de una familia sin el cual un hogar se derrumba como un castillo de naipes tras una corriente de aire. Me ha gustado, te felicito, no dejes de escribir. Un abrazo, Cristina.
Increíble…. lo que daría yo por estar en esa Cocina de nuevo viendo a mi abuela cocinar. Yo también te recuerdo mucho y tengo tu foto siempre conmigo ,recordándote… porque aunque te fuiste muy pronto sólo cuando yo tenía 14 añitos los mejores recuerdos de mi niñez lo tengo en esa casa, donde siempre estaba rodeados de mis primos/as y tíos/tías y sobre todo de ti abuela, siempre pendientes de todos tus nietos. Eras tan buena, tan noble,tan sencilla……Nos dejaste un vacío muy grande y se fue el mayor pilar de esta familia ,contigo todo era distinto. Te quiero y siempre estarás en mi corazón. Halla donde estés Te Quiero❤️❤️❤️
Rodeada de prim@s, de ti@s y del Cuevas jajajajaja
No me dejes fuera. Q yo tb te visto crecer en esa casa jajajaja
Preciosas palabras. Todo eso q cuentas, tambien lo viví Me ha hecho retroceder 30 años atras. Q tiempos aquellos…..
Saludos Primo
Precioso!!…..me dejas sin palabras!!!!..como tu bien dices una madre es la locomotora q guia a la familia.
Esta escrito con el corazon y eso se nota.. Espero impaciente el proximo articulo!!!!!
Gracias Maria. Un placer
tusitaladecai
Amiga…buagg no he podido terminar de leerselo a migue y a mis hijos pq el nudo atragantó mi garganta y las lágrimas no m dejaron ver,has escrito algo tan bonito y hermoso q ojalá pudieras conseguir,he vivido esos momentos no todos pero muchos para saber que lo q escribes es verdad q esa gran madre era una madraza q esa cocina siempre el paradero d todo aquel q llegará y siempre bien recibido esos ollones esas fuentes d ensaladilla esa ropa Blanca en los t endederos…jamás lo podré olvidar sois una gran familia x ese padre y esa madre q hicisteis y q dcir d ti amiga…Q te quiero con lokura y q jamás d los jamases cortare el hilo invisible q nos une,Cristina eres increíble.
Me encantó, Cristina, me hizo recordar las historias que me contabas de tus padres, cuando vivíamos en el mismo pueblo….. esperando más!
Rita!!! Este blog es de mi hermano. Y la verdad no tiene desperdicio…gracias por leerlo…. besos desde Chipiona.
Qué bien te ha quedado el relato Cristina.
En esa cocina también yo me he sentido uno más de la familia cosa, y me he tomado muchos cafés negros como tizón, que te decía yo con leche y para ti con leche eran dos gotas de leche na más.
Dile a Salvador q haber si le paso algún relato pa participar tb en su blog ????
Hola, gracias por el comentario, pero sobre todo gracias por brindarle tu amistad a mi hermana durante tantos años.
Tusitaladecai
Creo q yo salgo ganando más q ella con esta amistad ????????
Buenos días Cristina! Precioso homenaje a tu madre. Lleno de emociones y sentimientos. Una pena que la vida no nos pueda dar segundas oportunidades. Veo q te has quedado con lo bueno de esa vida en comun y eso es lo importante!
Ahora me voy a presentar. Soy amiga desde hace muchos muchos años de tu hermano Salvador. Tu no te vas a acordar de mí, yo de ti si. Alguna vez cuando erais pequeñas incluso hemos salido, yo con mis hermanas pequeñas y Salvador contigo y con Susana, a algún sitio con vosotras.
Un placer reencontrarte aquí. Bss
Me acuerdo perfectamente de ti…y de Manolo….me alegro de leerte…y bueno el relato creo que cuando se escriben de cosas vividas las palabras salen solas.un saludo!!!
No podía imaginar que te acordarás de mi. Me alegro!.
Si tienes razón, cuando afloran los sentimientos todo sale bien
Me alegro de reencontrarnos, seguiremos en contacto.
Bss
Hola Cristina. Me alegro mucho de cuanto esta pasando, además de la entrada que con tanto cariño dedicas a mamá. espero que te animes y envíes muchos mas
TUSITALADECAI
Vuelvo a leer y vuelvo a recordar…como aquel chanqleteo por la cocina..muy típico de mamá,para la que nunca existía el invierno,siempre iba en modo verano por aquella cocina…